Y ahora... ¿Qué pasó?

Todos éramos felices
y ¿qué ha pasado?
el espacio se convirtió en lejanía.

Los violines tocan su espacio
de largas y cansadas melodías...
llenas de historia
con las cuerdas rotas
o simplemente vacías.

Aún no es tarde
no se ha terminado el tiempo
el corazón llora
sosteniendo el vaivén
de una puerta...
que hace días amenaza con cerrarse.

Una vez..un momento...

No es bueno prometer, porque a veces quien menos esperamos nos espanta. Hay que pensar antes de actuar y no brindar el corazón a cualquiera que toque a la puerta, no necesariamente sea , el que debe ser.

Es lamentable como el mundo va girando y muchas veces...tantas veces, nisiquiera nos detenemos a observarle por un momento, o a preguntarnos que habría sido si...
Y, sinceramente, vano es dar palabras del alma a quien no tiene corazón...

Gracias a Dios por la vida, y por los momentos. Espero que en algún lugar, en algún momento, alguien aún quiera ser mejor para los demás y no para si mismo, que alguien tal vez, se detenga a ver la luna , sin razón, sólo porque sí. Que alguien algún día se alegre por alguien más, que dé las gracias por una palabra, que piense en dar y no en recibir...
Espero algún día recibir estos dones, o al menos uno de ellos. Espero si no tengo la dicha de recibirlos, al menos conocer a alguien que aunque tampoco los tenga, que le interesen tanto como a mí...

Un pequeño desahogo

Hazme el favor de no existir
De esfumar tu vida en solo un trazo,
De que te desgarre la vida el sentimiento
Y que corte tus venas un canto.
Ya no se sabe si las bendiciones son tragedias
Si las verdades son mentira,
Si los que decían amor,
Simplemente se esfumarían.

Como títere amarrado con sogas
Me comporto,
Como las canciones discordantes
Los sentimientos absortos.

Y desgarro una nube con mis uñas
Sangra por la herida,
Y el temor interminable la corroe,
Más no le importa a nadie
Lo que la vida dice,
Lo que los versos esconden.

Muérete,
Estúpido sentimiento de impotencia,
Muérete y come tus gritos
Lleno de pavor llena tu boca de tierra,
¡Que me importas!
¡Que le importa a la vida que me temas!

El sudor corroe los sentimientos
Y los recuerdos, como antes,
Se vuelven a cansar de la misma historia,
Se vuelven a hartar
De que siempre les digas que hacer,
Se vuelven a hartar,
De que nunca escuches,
De que siempre te quejes y lloriquees
Como una estúpida mocosa
Que juega con el lodo de la vida.

Cristales molidos en la tez, se expanden,
Las nubes ya no son las mismas,
Pedir perdón no basta,
Por eso gracias a la vida.

Seré feliz cuando pueda volar
Cuando pueda creer que la muerte es pasajera,
Cuando de repente te esfumes,
Maldito sentimiento de huellas.

En ciertos momentos